– Incrementar la visibilidad en línea: Aumentar la presencia en línea a través de estrategias como la optimización de motores de búsqueda (SEO), publicidad en línea, marketing de contenidos y presencia activa en redes sociales para que más personas puedan descubrir la marca.
– Generar leads o prospectos: Capturar información de contacto de clientes potenciales interesados en los productos o servicios de la empresa, generalmente a través de formularios en el sitio web, suscripciones a boletines informativos, descargas de contenido u otras tácticas.
– Construir y nutrir relaciones con los clientes: Fomentar la lealtad de los clientes existentes y potenciar las relaciones con ellos a través de campañas de correo electrónico, redes sociales y marketing de contenidos para convertirlos en clientes recurrentes.
– Aumentar la conversión: Optimizar el sitio web y las páginas de destino para aumentar la tasa de conversión, es decir, la proporción de visitantes que realizan una acción deseada, como hacer una compra, suscribirse o llenar un formulario.
– Mejorar la retención de clientes: Implementar estrategias de retención de clientes, como programas de fidelización, seguimiento postventa y atención al cliente excepcional para reducir la pérdida de clientes
– Segmentación y personalización: Utilizar datos y análisis para segmentar a la audiencia en grupos específicos y personalizar las estrategias de marketing para adaptarse a las necesidades y preferencias individuales de cada segmento.
